La transición de la vida universitaria al mundo laboral es un desafío que muchos jóvenes enfrentan con una mezcla de emoción e incertidumbre. María Arroyo, una joven periodista, compartió recientemente en una entrevista su experiencia personal en este proceso, destacando los desafíos y aprendizajes que encontró en el camino. Su historia es un reflejo de la realidad que muchos estudiantes y recién graduados enfrentan hoy en día, especialmente en un mundo que ha cambiado drásticamente debido a la pandemia.
María cursó la mitad de su carrera de manera presencial y la otra mitad desde casa debido a la pandemia, describió su formación académica como "muy descafeinada". A pesar de las limitaciones, subrayó la importancia de las asignaturas prácticas que le permitieron adquirir habilidades esenciales para su profesión.
Durante la entrevista, la periodista enfatizó la necesidad de que los estudiantes sean expuestos a situaciones reales y desafiantes durante su formación. "Necesitamos que nos pongan en apuros", afirmó, sugiriendo que enfrentarse a situaciones prácticas, como estar frente a una cámara o en un estudio de radio, es crucial para desarrollar la capacidad de reacción y adaptación.